No obstante que la Federalización de la nómina magisterial, representará una descarga financiera de la administración estatal, gremios educativos externaron sus reservas ante la captación de recursos federales, toda vez que se han recortado presupuestos y se registran varios adeudos.
Aglutinados en el Frente Estatal de Sindicatos de Educación Media Superior y Superior (FESEMSS), dirigentes señalaron que si bien con la absorción federal de la nómina a más de 30 mil docentes de educación básica, se puede suponer que habría garantías de los pagos estatales en subsistemas educativos, el riesgo es que la federación propicie de nueva cuenta déficits presupuestales en las dependencias.
Gerardo Bolaños, dirigente del referente que agrupa a más de 30 gremios, señaló que en el caso de adeudos del estado, se arrastra aún un débito de 300 mil pesos en pago de prestaciones y pagos a terceros, cuyos pagos deberán estar cubiertos en junio, cuando se espera que la federación asuma el pago a docentes.
La respuesta de la federación, señaló que, es fundamental para lograr el equilibrio en los pagos, al señalar que los presupuestos aprobados han disminuido y la asignación de las partes correspondientes se han retrasado desde el inicio del presente año y generado malestar entre los sindicalizados.
Al respecto, Hilario Marcelino, dirigente gremial del Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos (CECYTEM), señaló que por estos retrasos se inició ayer lunes un paro nacional de mil 165 planteles, mismo que se ha desactivado en varias entidades como Michoacán, al prometerles “por escrito”, que habría pago puntual de la primera quincena de abril y la parte correspondiente a cubrir primas vacacionales.
Eduardo Mendoza Andrade, dirigente de la Sindicato del Colegio de Bachilleres, señaló por su parte que habría que estar “atentos hasta donde sea el alcance” del apoyo federal, no obstante que en su caso, dijo, el pago de prestaciones lo absorbe el estado.
