RT actualidad / L. Brian Stauffer
La tecnología de la impresión 3D ha penetrado en todas las esferas de la vida: desde la creación de objetos sencillos o partes del cuerpo humano, hasta la construcción de edificios enteros. Esta vez le tocó el turno a las medicinas.
Un equipo de químicos de la Universidad de Illinois, EE.UU., encabezado por el experto químico Martin Burke, ha publicado el diseño de una impresora 3D “revolucionaria”, que tendrá la capacidad de crear compuestos químicos mediante la síntesis de moléculas. Se estima que el proceso duraría tan sólo unas horas, mientras que a un químico experimentado puede llevarle hasta años, informa el portal Science Daily, citando la revista ‘Science’.
La estrategia de Burke consiste en romper las moléculas en bloques más sencillos de modo que puedan ser fácilmente reunidas. La impresora funcionará a base de compuestos químicos básicos que se utilizarán como materia prima. El aparato sintetizará los elementos necesarios y eliminará los inútiles. Finalmente, tras una reacción química, reunirá los elementos necesarios para el compuesto.
Los investigadores ya han logrado diseñar 14 tipos diferentes de moléculas. “Esperamos que dicha tecnología cree nuevas oportunidades en otras esferas terapéuticas”, sostiene el científico con optimismo.