Sostuvo que durante todo el proceso electoral se desarrollaron al menos 12 mesas de seguridad y en ninguna ocasión se denunció la intervención de grupos delictivos, sino hasta después de que perdiera su candidato Carlos Herrera
Morelia, Michoacán.- Las acusaciones del gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo respecto a una supuesta narcoelección resultan risibles, ya que durante todo el proceso electoral el mandatario estatal no denunció la intervención de grupos delictivos, sino hasta después de que su candidato, Carlos Herrera Tello perdiera las elecciones, dio a conocer el delegado del bienestar, Roberto Pantoja Arzola.
A través de redes sociales expuso que durante el proceso electoral se realizaron al menos 12 sesiones de la Mesa de Trabajo de Seguimiento al Proceso Electoral, mientras que en ninguna de estas ocasiones se hizo referencia a la intervención de grupos de la delincuencia organizada que hayan participado en las elecciones en favor de algún candidato en particular.
“En ninguna sesión, el Gobernador de Michoacán Silvano Aureoles denunció en esta mesa la participación de grupos ajenos a los actores políticos, durante el desarrollo del proceso electoral, que pusiera en riesgo el proceso, tampoco lo hicieron los dirigentes de partidos políticos.
Resulta risible la forma en la que un mes después se denuncia el tema, donde en Huetamo por cierto ganó su candidato”, señaló.
Por ello, sostuvo, las acusaciones resultan risibles, ya que dejó entrever únicamente responden a un tema político ante la pérdida del proyecto político que impulsó de la mano del Equipo por Michoacán.