Quienes no se vacunen puedan quedar vetados en actividades o espacios públicos.
El Tribunal Supremo de Brasil aprobó que la campaña de vacunación contra el covid-19 sea obligatoria, lo que significa que las autoridades estatales y municipales puedan establecer medidas contra quienes, como el presidente Jair Bolsonaro, no están dispuestos a sumarse a la campaña general de inmunización frente a la pandemia.
Esto significa un golpe a los antivacunas, por autorizar a las distintas administraciones sancionar a quienes no se quieran poner la vacuna, a pesar de que también admite que no puede forzarse policialmente a nadie. La resolución tuvo el voto a favor de 10 magistrados y sólo uno en contra, y anticipa que quienes no se vacunen puedan quedar vetados en actividades o espacios públicos.
Los mensajes de Bolsonaro, quien tras contraer el coronavirus apela a la libertad individual para defender que la vacuna no sea obligatoria, han calado en parte de la población, como lo demuestra el hecho de que son menos quienes se muestran dispuestos a inmunizarse.
A principios de agosto, el dato rondaba el 89%, pero en diciembre ha caído a 73%, según una encuesta de Datafolha. Los contrarios a la vacuna han pasado en este periodo de 9% a 22%, informó la agencia Bloomberg.
Apenas este jueves el presidente brasileño tachó de “idiotas” a quienes consideran que da un mal ejemplo al no vacunarse, y cuestionó la efectividad de los fármacos.
“En el contrato de Pfizer que tenemos ahí, ellos no se responsabilizan si yo me vuelvo un caimán, si usted se vuelve un súper hombre, o si le crece barba a una mujer, si algún hombre comienza a hablar más agudo”, afirmó.
Además el gobierno de Brasil anunció que solicitará una PCR negativa a todos los viajeros que entren al país a partir del 30 de diciembre, sin importar su nacionalidad, para tratar de contener la expansión de la pandemia de covid-19.
La prueba deberá haberse realizaron con 72 horas de antelación máxima y recogerlo corresponderá a las aerolíneas, según consta en la orden emitida anoche. El viajero también deberá firmar un texto en el que se compromete a respetar las medidas para prevenir contagios, que no se han especificado, según el portal G1.
Hasta ahora el gobierno de Bolsonaro había ignorado las recomendaciones de la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa), que ya había solicitado la obligatoriedad de las pruebas para quienes entrasen a Brasil por vía aérea.
El gigante sudamericano acumula 7.11 millones de casos y casi 185 mil muertes después de confirmar unos 70 mil positivos en un solo día.