Enrique Legorreta / @enriquelego3_0
México, DF.-Este 2014 tiene ya dos reformas en funcionamiento: la Reforma Hacendaria con sus nuevos impuestos, y la Reforma Energética, que enfrenta una crísis a los intentos de la inversión privada de pertenecer a Petróleos Mexicanos (Pemex) y la luchade la izquierda por echar para atrás los cambios realizados a la Carta Magna.
En este sentido, Peña Nieto no pierde el tiempo en pasar del año de las “reformas” al año de la “consolidación”, ya que este día se dará paso a otra ley que “beneficiará” al país: la promulgación de la Reforma Financiera.
La reforma está centrada en el discurso de que a los mexicanos se les facilitará la adquisición de algún crédito para que sea ocupado en su beneficio, solicitud que los bancos darán sin tantas acciones de verificación del solicitante, pero también da la facultad a éstas de poder cobrar, o en su caso, embargar los bienes del deudor sin ningún problema.
En entrevista para REVOLUCIÓN TRESPUNTOCERO, Gerardo Esquivel, doctor en Economía y premio “Ramón Beteta Quintana”, señaló que esta iniciativa quedó a deber a los mexicanos, ya que está incompleta, pues no tiene el diseño apropiado para cambiar la estructura de incentivos de los Bancos en el país.
“La reforma quedará debiendo, ya que a pesar de que identifican que el problema efectivamente está del lado de la oferta, [en cuan a] la situación del lado de los bancos no hacen nada para cambiar su comportamiento y, lo que hacen, lo hacen en un sentido contrario que debería enfocarse para promover los incentivos al sector empresarial quienes son los que promueven el empleo”, señaló.
Tras ser aprobada en la Cámara de Diputados y Senadores, la Reforma Financiera que se promulga, está lejos de dar resultados a corto plazo para la sociedad, ya que sólo estaría beneficiando a la banca extranjera y no al mexicano.
“Es una reforma que es necesaria para el crecimiento del país, pero la ausencia de la baja penetración de crédito se debe a que los bancos no ofrecen las mejores condiciones para la gente y que ya se había planteado por mucho tiempo, sólo que las autoridades hacían oídos sordos, pero donde pierde impacto una reforma como ésta es que la forma en que se planteó no es el mecanismo correcto y, si se aprueba como está planteada, puede tener un impacto que demuestre que no se hizo correctamente”, comentó Esquivel.
En su momento, los impulsores de la reforma aseguraron que ésta facilitará el otorgamiento de créditos bancarios mediante un “blindaje”, y que ese mismo mecanismo dé a los bancos la seguridad de recuperar los préstamos dados.
Sin embargo se recalcó por parte de la oposición, que esta ley, así como se suscribió y que se pone en marcha a partir de hoy, no fortalece la capacidad de pago de los usuarios, pero sí otorga más derechos a las instituciones financieras para recuperar los préstamos pese a la nueva condición de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF), quien será más rigurosa en el tema bancario.
Así, 2014 no sólo llega con dos reformas, sino que una de las iniciativas que debería de generar cambios en la economía del país llega con dudas a la hora de ser puesta en práctica.