Empresas privadas han comenzado a realizar trámites y contacto con farmacéuticas extranjeras entre las que destaca la Sputnik V.
Empresas privadas de México han comenzado a realizar los trámites formales y establecer contacto con farmacéuticas extranjeras para obtener dosis de las diferentes vacunas contra el SARS-CoV-2 y comercializarlas en el país.
En específico quienes se han interesado en la vacuna Sputnik V para su venta en México son los propietarios del Laboratorio Santo Domingo, con sede en Guadalajara, Jalisco, quienes han preguntado al Gobierno ruso sobre la vacuna.
“A nosotros sí nos encantaría incluir el sistema de vacunación para la unidad de negocio, y estamos en espera de que se pueda. Inclusive ya tuvimos acercamiento con la embajada rusa y estamos en pláticas para poder hacer la solicitud formal de la posibilidad para importar la vacuna”, dijo el director de Laboratorio Santo Domingo, Jesús Ortega Martínez.
En este sentido el director médico de Laboratorio Santo Domingo, Juan José González señaló que el trámite de importación de vacunas puede tardar entre 3 y 4 meses.
“Como tal, el inicio de trámites ya lo hicimos el mes pasado y esperamos que las autoridades nos autoricen y revisen. De entrada, hay que tener un refrigerador especial a menos de 60 grados, una serie de bitácoras de vacunas que tienes que vigilar, y es un procedimiento un poco engorroso. Pero, afortunadamente, como ya tenemos banco de sangre, para nosotros será muy sencillo”, dijo en una entrevista con Milenio.
De acuerdo con el canciller Marcelo Ebrard, los fabricantes de la vacuna rusa presentaron su solicitud y la documentación necesaria a la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) para realizar estudios clínicos y obtener la autorización en México, así lo indicó el 14 de diciembre en su cuenta de Twitter.
“México, al igual que otros países, contará con una cesta de vacunas y creo que Sputnik V tiene todas las posibilidades de estar entre ellas”, subrayó, matizando que “hay buenas expectativas a pesar de la fuerte competencia entre los productores y laboratorios”.