Wall Street vivió una jornada de auténtico colapso este 4 de abril de 2025. El índice S&P 500 se desplomó un 6%, su mayor caída en años, acompañado por retrocesos del 5.8% en el Nasdaq y del 5.5% en el Dow Jones. Los mercados globales no quedaron exentos del impacto: el Ibex 35 español se hundió un 5.9%, su peor jornada desde la pandemia de 2020.
El desplome fue provocado por el anuncio del presidente Donald Trump de imponer nuevos aranceles del 54% a productos provenientes de China y del 20% a importaciones de la Unión Europea. Esta medida, enmarcada en una renovada guerra comercial, generó alarma inmediata entre inversionistas que temen una recesión mundial.
La respuesta de China fue igual de contundente. El gigante asiático contraatacó con un arancel del 34% a productos estadounidenses, lo que elevó aún más las tensiones económicas. En paralelo, el precio del petróleo Brent cayó por el temor a una desaceleración global, mientras que el dólar se debilitó frente al euro, reflejando el nerviosismo del mercado.
El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, advirtió que los nuevos aranceles podrían tener efectos inflacionarios severos y desacelerar el crecimiento económico. Esta combinación de factores ha generado una tormenta perfecta que ya sacude a las bolsas del mundo y amenaza con una nueva era de incertidumbre económica.
El mundo observa con preocupación cómo una decisión unilateral está arrastrando a la economía global a un escenario que muchos pensaban superado: el proteccionismo extremo y la ruptura del orden comercial internacional.