Morelia, Michoacán. Con la exigencia a las autoridades, para que se esclarezca el asesinato de Gustavo Ernesto Reyes Álvarez, este miércoles estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) marcharon desde la sede del Poder Judicial hasta el Centro Histórico, donde en mítines ante el Palacio de Gobierno y el Congreso, demandaron “la localización y el castigo de los culpables”.
La movilización, conformada en su mayoría por alumnos de la Escuela Nacional de Estudios Superiores (ENES) del Campus Morelia de la UNAM, reunió a un promedio de 500 jóvenes, partió después de las 10:00 horas de Avenida La Huerta, frente a la sede del Poder Judicial, para avanzar hacia la Avenida Madero y, con diversas paradas en su trayectoria alcanzar el primer cuadro de la ciudad cerca de las 13:00 horas.
Reyes Álvarez tenía menos de un mes de haber llegado a la ciudad. Llegó a Morelia atraído por la oferta académica de la UNAM, donde se inscribió en Música y Tecnología Artística de la ENES. El pasado 2 de septiembre su cuerpo fue localizado en las inmediaciones de la Presa de Cointzio, asesinado de un balazo en la cabeza, días después trascendió que era alumno de la UNAM. Oficialmente, no se sabe si hay un seguimiento del caso por las autoridades.
Durante la marcha, los gritos constantes fueron “Todos somos Gustavo”, “Gustavo, Gustavo, no es un caso aislado”, “No sólo faltan 43” y “Por qué, por qué nos asesinan, si somos la esperanza de América Latina”. Al frente las mantas registraban: “Por tu espíritu hablará mi raza” –en alusión al lema de la UNAM, “Por mi raza hablará el espíritu”-, al igual que “UNAM Morelia, Fuera Peña”.
Gritos sin cesar llenaron el trayecto, en una marcha donde pese a los aplausos y ciertos cánticos, la indignación era la que predominaba y a la que se unieron estudiantes de la Facultad de Letras de la Universidad Michoacana y un pequeño contingente de estudiantes de la Escuela Normal Superior, al igual que en algunos tramos concitaron el aplauso y los “Duro, duro” de personas que los veían pasar.
Frente a Palacio de Gobierno, los estudiantes leyeron un pronunciamiento donde reiteraron que el caso de Gustavo se inscribe en un clima generalizado de inseguridad en el país, situación ante la que no basta “llenar nuestras calles de policías ni de militares, porque ya hemos visto que esa no es la solución. Exigimos calles iluminadas, libres de acoso y de violencia, espacios de esparcimiento dignos, espacios de tránsito accesibles para todas las personas y protocolos para atender debidamente la violencia en sus distintos contextos”.
En su pliego de peticiones, demandaron a las autoridades esclarecer el caso, localizar y castigar a los culpables, al igual que “todos los casos de violencia en la entidad, así como realizar acciones concretas para detener los altos niveles de violencia e impunidad para asegurar el derecho a la vida, dignidad y tranquilidad de los ciudadanos”.
Además, plantearon que se invierta en la construcción de espacios gratuitos de esparcimiento, educativos, deportivos y artísticos, que impacten en el mejoramiento de las condiciones sociales de los habitantes de la zona noroeste de Morelia y creen un contexto óptimo para reconstruir el tejido social. Rechazamos la presencia de policías y militares como estrategia de seguridad”.
Otra de sus demandas, se refiere a la “atención inmediata a los proyectos, hasta ahora inconclusos o ignorados, que están encaminados a mejorar el espacio público y la movilidad en la zona suroeste de Morelia, tales como alumbrado público eficiente, implementación de ciclovías y zonas peatonales, transporte público suficiente, digno y seguro”.
En el Congreso del Estado, ingresó una comisión para ser atendida por legisladores.
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