Pedro Cervantes / @thachiskin
Morelia, Michoacán. El 17 de octubre de 1953, se logró la igualdad ciudadana entre mujeres y hombres en México, tras años de lucha, por fin se obtuvo el derecho de la mujer a votar y ser votadas a cargos de elección popular.
Este día se recuerda porque fue cuando apareció el decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación, sin embargo, esta lucha no se ganó porque a un grupo de hombres se le haya ocurrido, sino que fue la victoria de todo un movimiento social femenino que buscaba la paridad de género.
La lucha por la equidad de género se puede remontar a la Revolución Mexicana, cuando la mujer tuvo un papel sobresaliente, ya que no sólo estaba detrás del hombre, si no que luchaba, combatía y dirigían el movimiento armado.
Aunque en 1917 se firmó la nueva Constitución, los asambleístas creían que “las mujeres no sienten la necesidad de participar en los asuntos públicos, como lo demuestra la falta de todo movimiento colectivo en este sentido”.
Los antecedentes legislativos se pueden remontar al año de 1923 en Yucatán, cuando era gobernador Felipe Carrillo Puerto, fue el primer estado que reconoció el voto municipal y estatal femenino, donde tres mujeres fueron electas para el Congreso Estatal, Elvia Carrillo Puerto, Raquel Dzib y Beatriz Peniche. A la muerte de Felipe, las diputadas tuvieron que dejar sus puestos.
En San Luis Potosí se reconoce el derecho en 1924 y 1925, pero en 1926 se les niega nuevamente. Al igual en Chiapas en el año de 1925 se consigue la aprobación de la ley.
Cuando Lázaro Cárdenas fue presidente, envió la iniciativa de ley para la reforma del artículo 34 constitucional, la cual permitía el voto de las mujeres, en ambas cámaras se aprobó, pero nunca se declaró la vigencia.
En 1947 en el mandato de Miguel Alemán, se publicó el derecho a votar para las mujeres, pero sólo en elecciones municipales. Fue hasta el 3 de julio de 1955 que las mujeres pudieron elegir libremente en unas elecciones federales, las cuales integraron la XLIII legislatura del Congreso de la Unión, en donde cuatro mujeres fueron electas.
A 62 años de la conquista histórica del voto femenino
En días pasados, la Organización Mundial de las Naciones Unidas (ONU) designó a Enrique Peña Nieto como presidente de la Cumbre de Igualdad de Género y Empoderamiento de las Mujeres, el mismo que no conoce el precio del kilo de tortilla bajo el argumento de que “no es la señora de la casa”.
Ante sus iguales declaró que en México se tienen avances en materia de género, ya que el 42 por ciento de la cámara de diputados está compuesta por mujeres, pero en su Gabinete Presidencial, son pocas las que tienen participación política, pues de los 24 puestos, sólo cuatro están a cargo de féminas.
En México aún queda mucho por avanzar en igualdad de género. En lo que respecta a la representación popular aún no existe una mujer presidenta, hasta el 2012 sólo 6 mujeres habían gobernado un estado de México. Aunque la corrupción y la impunidad no tiene que ver con el género.
