En lo alto de la yacata el fuego se encendió y los asistentes lo compartieron; con la constelación de Orión como testigo cenital, la comunidad de Ocumicho celebró y festejó un año y ciclo agrícola nuevo. El fuego viajó desde Erongarícuaro y durante todo el 1 de febrero, las calles de Ocumicho recibieron a demás visitantes y realizaron festejos y vieron expresiones culturas Purépechas.
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Antes de las 23:00, los cargueros subieron a lo alto de la yacata para comenzar el ritual a oscuras, sin grabaciones ni fotos. Un fuerte y frio viento los golpeaba mientras lanzaban rezos; un hombre con un pedernal iniciaba el fuego nuevo.
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Después de esto, y cuando los asistentes ya tenían un ocote encendido, el anunció de la sede para el año nuevo del 2025 se hizo, y los ahí presentes se emocionaron al saber que tocaba en el pueblo de Santa Clara del Cobre en la zona del lago de Zirahuen. El fuego y los símbolos estarán durante un año en Ocumicho bajo un resguardo de la población, después, comenzará su camino a su nueva sede
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Esta celebración se retoma desde 1983 y marca el inicio de un nuevo ciclo agrícola en las cultura purépecha, así como una forma de agradecimiento a la tierra y a Kurhikuaeri (Dios del sol)
