Morelia, Michoacán.- Habitantes del municipio de Zacapu, en Michoacán, denunciaron que zonas arqueológicas son saqueadas para la construcción de centros comerciales, la siembra de huertas de aguacate y la extracción de material.
Jaime Contreras Díaz, representante del Grupo Indígena Legítimo Autónomo al Rescate de la Cultura Purépecha, explicó que los saqueos se llevan a cabo en un área de 500-600 hectáreas, donde antiguamente se estableció la “Cuna del Imperio Purépecha” y donde se ubican las Yácatas.
En esa zona, donde se localiza el cerro “La Crucita”, se construye un desarrollo que incluye un centro comercial y un cine de una reconocida cadena nacional.
Según los denunciantes, diariamente salen de ahí camiones repletos de piedras grabadas, monolitos y otros objetos prehispánicos que calculan, en el mercado negro se venden en mil o hasta 10 mil pesos.
“Día y noche están llegando motos, camionetas (que se llevan las piezas) en bolsas negras. Son piezas como monitos que hacían los antepasados. Calculamos que son 60 yácatas desde Villa Jiménez hasta La Crucita, pero hay más hasta el cerro de El Tecolote”, explicó.
En el cerro de “El Tecolote”, una situación similar ocurre, pero ahí, empresarios agrícolas se han dispuesto a destruir y saquear un incontable número de yácatas para sembrar árboles de aguacate.
“Quemaron el cerro para sembrar aguacate y ahí hay muchas cuevas de nuestros antepasados, ahí estuvo el rey Caltzontzin”, destacó el comunero.
Los habitantes de la zona también denunciaron que han recibido amenazas de muerte por parte de desconocidos que les exigen no denunciar el saqueo ni llevar acciones en contra; “a la gente que quiere ayudar luego luego la calman”, lamentó.
A pesar de que se han hecho denuncias y se han presentado oficios ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), no se ha recibido respuesta ni se han tomado medidas para detener el saqueo.
Los representantes de la comunidad piden que las autoridades intervengan para rescatar el sitio arqueológico, que sea conservado y se abra al público.
