Panel del T-MEC concluye que las restricciones mexicanas carecen de base científica
El panel de resolución de controversias del T-MEC falló en contra de México en la disputa sobre el maíz genéticamente modificado, argumentando que las restricciones impuestas por el gobierno mexicano no están respaldadas por evidencia científica.
La resolución respalda las siete reclamaciones presentadas por Estados Unidos, señalando que las medidas de México «obstruyen el acceso al mercado acordado en el T-MEC». México cuenta con un plazo de 45 días, a partir del 20 de diciembre, para cumplir con las disposiciones del fallo.
Impacto económico y político en el comercio agrícola
Katherine Tai, representante comercial de Estados Unidos, destacó que las exportaciones de maíz a México alcanzan un valor anual de 4.8 mil millones de dólares, lo que subraya la importancia económica del mercado mexicano para los agricultores estadounidenses.
«La decisión confirma nuestras preocupaciones sobre las políticas biotecnológicas de México y su impacto negativo en nuestras exportaciones», afirmó Tai, quien abogó por la implementación de políticas comerciales basadas en la ciencia para garantizar la competencia justa y la sostenibilidad agrícola en ambos países.
Tom Vilsack, secretario de Agricultura, criticó las medidas de México, calificándolas de inconsistentes con los estándares internacionales. «Este fallo asegura que nuestros agricultores mantendrán acceso pleno al mercado mexicano, reafirmando el comercio justo y las normas científicas que rigen el T-MEC», señaló.
La decisión no solo genera cuestionamientos sobre la política biotecnológica mexicana, sino que también establece un precedente significativo en la relación comercial entre México y Estados Unidos.
