Patricia Monreal / @Michoacan3_0
Morelia, Michoacán.-Entre los abusos que tiene que padecer los migrantes michoacanos se encuentran también aquellos propinados por las autoridades encargadas de velar por sus derechos, prueba de ello son 2.6 millones de pesos del Fondo de Apoyo a Migrantes que debieron destinarse en apoyo a vivienda y proyectos productivos.
Lo anterior conforme a las revisiones realizadas por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) a la Cuenta Pública Federal 2015, año en que Salvador Jara Guerrero fue gobernador de enero a septiembre, y Silvano Aureoles Conejo de octubre a diciembre.
De acuerdo con el órgano fiscalizador los dos millones 616.3 millones de pesos representan un probable daño a la hacienda pública federal, y representan el 5.5 por ciento del total de los recursos transferidos.
De esos 2.6 millones, un millón 330 mil eran recursos destinados a “Proyectos de apoyo para el mejoramiento de vivienda” en donde se reportaron 17 presuntos beneficiarios que no acreditaron la propiedad en la que se aplicaron los recursos del fondo.
Además las solicitudes de apoyo presentadas presentaban inconsistencias e irregularidades ya que no aclaraban el tipo de mejora que se pretendía realizar a las viviendas, como tampoco las medidas y las características de las acciones que se ejecutarían.
Además hay 898.9 millones de pesos destinados a “Acciones de apoyo para emprender proyectos y actividades productivas”, sobre los que la Auditoría descubrió que los beneficiarios no presentaban evidencia de haber recibido capacitación en actividades económicas de producción, transformación o de servicios ni tener experiencia probada.
En diez casos el órgano fiscalizador encontró que los beneficiarios no acreditaban parentesco del familiar del que se recibieron las remesas; asimismo en 30 casos no se contó con la documentación comprobatoria que cumpliera con los requisitos fiscales correspondientes.
Incluso hay un pico de 178.9 mil pesos por el pago de viáticos que no contaron con la documentación justificativa y comprobatoria correspondiente.
Por si fuera poco tampoco se sabe qué fue de los intereses generados por la cuenta bancaría en la que estaba los recursos del fondo.